Yo siempre he pasado de lo que la gente suele llamar las fechas señaladas. Sobre todo me refiero a los cumpleaños. Pero es muy extraño, si que lo es. Es muy extraño como las vivencias pueden dar diferentes significados a las fechas. Como para alguno el 4 de Julio es el día de la Independencia, mientras para otros sea el día de la Dependencia.El año pasado ya fue un cumpleaños muy especial. Tal día como hoy y como el de ayer (18-06) yo estaba ingresado en un hospital. Esa fue la primera vez en mi vida que sentía añoranza o tristeza por estar así y ahí un día especial. Tuve la suerte de que estaban mis amigos y mi familia. Pero lo que más recuerdo es que ese año tuve uno de los mejores regalos que te pueden hacer: experiencia. Ese mismo día se cayó una venda que llevaba desde hacía años en los ojos. Comprendí que no es más amigo el que más alto lo dice (cuando alguien no tiene claro quien es, grita muy alto su nombre). Ese día hice algo de lo que me sigo arrepintiendo: eché de mi lado a dos amigas ya que iba a venir La Extraña. La Extraña es un ser que ese día no vino, un ser que no vendrá días posteriores y que no vino (ese día me di cuenta) días anteriores.
Yo este año, intenté que fuera un día normal, pero no me dejaron (no me dejasteis). Vino Carlinhos Brown y miles (si desgraciadamente fueron miles) de desgraciados se reunieron para decir cosas como que mi chico y yo nunca deberíamos ser ni matrimonio ni familia. El caso es que después de bailar con Carlinhos, abrazar a mi hermano bajo los chorros de agua y besarme con mi chico entre la multitud, nos fuimos al bar de Irene (como un sábado normal). Allí me cantaron el cumpleaños feliz y me dieron sus regalos (son unos ilusos porque no saben que el mejor regalo es tenerles a ellos). Luego fuimos a Las Botellitas, bueno al Ambientad@s. Yo entré el último, ya sabes que yo saludo hasta al cartero aunque no recuerde ni sepa su nombre. Cuando llegué al fondo del local me fui a pedir una copa. Me di cuenta de que todo el mundo me miraba. Eva (creo que aquí serás Brocca) hizo un gesto y fue entonces cuando vi, en una pared colgado el cuadro que veis. ¡¡¡ERA YO!!! No me lo creía, era una ilusión que yo tenía desde hacía siglos y encima las molestias y el trabajo para que estuviese allí. El culpable de esto, y de la mayor parte de la felicidad que me rodea desde hace dos meses, fue Jose. Le abracé, le miré, le besé, le rebesé Dios es un sol.
Es uno de los cumpleaños que no voy a olvidar. El cuadro, los calzoncillos, la camisa, todo eso se puede romper, perder, quemar, pero lo que yo siento por Jose y por mis amigos (sabéis quienes sois) es indestructible. Gracias por ser mi regalo, vosotros sois mi vida. Estoy en vuestras manos, sé que no me vais a fallar. Gracias, por sorprenderme, quererme, aguantarme. Gracias por hacerme sonreír. Cuando estoy con vosotros siempre soy Feliz.
GRACIAS
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Jose -